Abogados que recuperan fondos para víctimas de robos piden $315 mil por honorarios
Los abogados que trabajan para recuperar el dinero para las víctimas del arrestado abogado Robert Graham, quieren más de la mitad de los fondos que el fiduciario tiene a mano para los honorarios legales, muestran los registros.
El 9 de febrero, el abogado de Las Vegas, Jacob Houmand y sus asociados, presentaron una solicitud al tribunal de casi 316 mil dólares en honorarios y gastos por el trabajo en el caso desde 2016. El juez de la Corte de Bancarrota de Estados Unidos, Bruce T. Beesley, está programado para revisar las presentaciones el 9 de marzo, según registros.
El fiduciario está reteniendo 528 mil dólares, dice la presentación, y añade que habrá cobrado 807 mil 106.78 dólares por todo el caso.
Pero la profesora de derecho de la UNLV, Nancy B. Rapoport, que ha revisado los honorarios de varios tribunales de quiebra en otros casos, explicó que las víctimas pueden pedir al tribunal que rechace los honorarios que consideren irrazonables. Tras revisar las facturas detalladas a petición del Review-Journal, Rapoport se mostró preocupada por la posibilidad de que algunos de los conceptos facturados por los abogados no fueran necesarios.
Rapoport señaló que el tribunal podría cuestionar las facturaciones por la investigación legal que los abogados de bancarrota con experiencia ya deberían saber y las horas facturadas por el trabajo de los abogados que probablemente podría ser manejado por el administrador, o personal menos remunerado.
“Hay cuestiones planteadas aquí que un tribunal podría querer revisar, ya sea que una parte interesada se oponga o no”, escribió en un intercambio de correos electrónicos.
En 2017, Graham se declaró culpable y fue condenado a entre 16 y 40 años de prisión por robar más de 16 millones de dólares de las cuentas de sus clientes para pagar gastos empresariales y personales. El juez le ordenó devolver el dinero en restitución, pero una investigación del Review-Journal encontró que nada de eso ha sido pagado.
Las víctimas de Graham presentaron un caso de bancarrota involuntaria en 2016 contra su firma para recuperar cualquier activo restante, pero después de más de cuatro años, solo se ha pagado a los contadores y abogados.
Activos y cuentas
No está claro si los aproximadamente 800 mil dólares que cobró el fiduciario incluyen unos 400 mil dólares de cuentas por cobrar vencidas. Rapoport dijo que las deudas pendientes tan antiguas son casi imposibles de cobrar.
Al solicitar los honorarios y gastos, Houmand escribió que los honorarios para pagarle a él y a otros abogados se facturan a 250 y 375 dólares la hora, y que fueron por la administración del caso, el análisis y la recuperación de los activos, las reuniones, la comunicación y otros elementos en la recaudación de activos para las víctimas.
Los extractos de facturación detallados de Houmand muestran repetidamente que miles de dólares se destinan a investigaciones que un abogado experto en quiebras debería conocer o a trabajos que otros podrían hacer más baratos.
Por ejemplo, el 22 de diciembre de 2016, Houmand facturó alrededor de mil 200 dólares por “investigación y análisis con respecto a la capacidad de un fideicomisario del capítulo 7 para evitar las transferencias realizadas desde una cuenta de fideicomiso IOLTA”. Cinco días después, facturó 942 dólares por “investigación y análisis en relación con la capacidad de un fideicomisario del capítulo 7 para evitar transferencias de bienes en fideicomiso”.
El 29 de diciembre de 2016 se facturaron más de 600 dólares por investigar y obtener documentos de la oficina de Registro del Condado Washington sobre una propiedad que Graham poseía en Utah. El 4 de enero de 2017, los abogados facturaron 225 dólares por menos de una hora para visitar un posible lugar de subasta para deshacerse de cualquier propiedad de Graham que identificaran. Seis días después cobraron 585 dólares por menos de dos horas para subir materiales a un sitio web para proporcionar información a los acreedores sobre el estado del caso, muestran los registros.
La ley de quiebras exige que los contratistas y los deudores garantizados cobren antes que las víctimas, dijo Rapoport.
Más dinero para los contratistas
El Review-Journal informó en enero de que ya se han pagado 113 mil dólares a los contadores y abogados, incluidos 108 mil dólares a una empresa de contabilidad forense para determinar qué activos de Graham podrían ser embargados. Un portavoz de la empresa declinó hacer comentarios sobre la cantidad de dinero recuperada.
En las últimas presentaciones, los abogados de Century City, California, Diamond McCarthy, LLP, pidieron cuatro mil 500 dólares por ocuparse del seguro de mala praxis de Graham, y por revisar el caso penal y los registros de bancarrota de la esposa de Graham, según los registros.
Pero otro abogado ya facturó por el trabajo en el seguro de mala praxis, revelan los registros y las entrevistas.
El abogado de Las Vegas, Ryan Andersen, fue contratado en régimen de contingencia para ver si podía convencer a la compañía de seguros de mala praxis de Graham de que pagara a las víctimas. Obtuvo un acuerdo para que la compañía devolviera unos 11 mil dólares en primas para resolver el caso. Andersen recibió el 40 por ciento de esa cantidad, es decir, unos cinco mil dólares, por 60 horas de trabajo. Dijo que era mucho menos de lo que habría recibido si se le hubiera permitido facturar su tarifa por hora.
“En un caso como éste (y en otros casos de fraude financiero) es muy costoso y lleva mucho tiempo desenmarañarlo y requiere conocimientos especializados”, explicó en una entrevista en enero. “La distribución lleva mucho tiempo en un caso como éste”.
Oportunidades de activos perdidos
Parton agregó que su abogado le informó al fiduciario sobre el dinero del cliente que Graham gastó en donaciones a la Universidad Estatal de Colorado, a Boy’s Town y a las cuentas que Graham tenía en City National Bank. Pero Parton argumentó que no ha visto ningún esfuerzo para investigar y recuperar esos fondos.
“Cada vez que sacamos el tema, nadie quiere hablar de ello”, señaló sobre la cuenta de City National.
Parton dijo que sus temores de que los abogados y los contratistas se lleven la mayor parte del dinero parecen hacerse realidad.
“No quedará nada”, contestó Parton de las últimas presentaciones. “Es preocupante que (los abogados y contadores) se peleen por todo el resto del dinero y que ninguno vaya a parar a las víctimas”.
Healey y los representantes de Diamond McCarthy no devolvieron las llamadas ni los correos electrónicos en busca de comentarios.
