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Acusan a la esposa de un pastor de encubrimiento en el caso de abusos sexuales

La esposa de un pastor de Las Vegas fue acusada el jueves mientras los fiscales añadían más cargos a una larga lista de acusaciones contra el hombre de 44 años acusado de abusar sexualmente de las jóvenes de su congregación.

Bramwell Bernardo Retana, acusado de un total de 55 cargos de delito grave, se ordenó que se le retenga bajo fianza de 800 mil dólares.

La última acusación añadió cargos de agresión sexual con una menor y el uso de una menor en la producción de pornografía. Retana también está acusado de lascivia con una menor de 14 años, secuestro en primer grado y abuso infantil.

Ana Villalobos-Casares, la esposa del pastor de la Iglesia Cristiana Oasis De Paz, fue acusada de un cargo de impedir o disuadir a un testigo o víctima de denunciar un delito, también un delito grave.

El Departamento de Policía Metropolitana (LVMPD) informó que comenzó a investigar a Retana el año pasado después de que una niña le dijera a sus padres que él había estado abusando sexualmente de ella durante más de un año. Fue arrestado el 20 de diciembre.

Desde entonces, las autoridades han identificado al menos ocho presuntas víctimas. La Jueza de Distrito, Cristina Silva, fijó la fianza de Retana en 100 mil dólares para cada una de ellas.

“Estaba usando su posición para atrapar a estas chicas y aprovecharse de ellas”, le reportó a la jueza Sandra DiGiacomo, Subprocuradora de Distrito. “Y todas estas chicas han sido afectadas”.

El abogado de Retana, Ryan Helmick, trató de argumentar a favor de una fianza más baja.

Las acusaciones van desde que el pastor dejaba pornografía en la computadora de su iglesia para que los niños la vieran, besar los pies de las niñas y pedirles que le escupieran en la boca cuando él tuviera “sed”, según el fiscal.

En el caso más reciente, una niña le relató a la policía que Retana le había ordenado guardar silencio después de que él la tocara por encima de su ropa durante un evento juvenil navideño en 2016 en la iglesia, que él y su esposa fundaron en 2020 Michael Way en marzo de 2004.

“Estaba en una posición, no solo de autoridad, sino de confianza”, señaló DiGiacomo. “Era su predicador, su pastor, su sacerdote, y se aprovechó de todos estos padres y todos estos niños usándolos para sus propios fetiches y juegos”.

Su esposa sabía de los abusos desde al menos mayo, cuando supo que Retana había besado a una chica, según el fiscal.

Días antes del arresto de su marido, se le escuchó al teléfono con la primera chica que se presentó, diciéndole: “Perdón por hablarte de esa manera, pensé que estabas tratando de robarme a mi marido”.

El fiscal también indicó que Retana llamó más tarde a su esposa desde la cárcel, diciéndole que estaba avergonzado. “Ella responde que quiere que él le quite sus problemas”, agregó DiGiacomo.

Retana entonces supuestamente le contestó a su esposa: “Si el escándalo se pone feo, entonces es una buena idea dejar el país”.

La jueza fijó la fianza de Villalobos-Casares en mil 500 dólares y ordenó monitoreo electrónico.

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