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Alcaldesa de Las Vegas llama al gobernador “un dictador”

Mientras los gobiernos del sur de Nevada anunciaban el lunes ajustes para adherirse a reglas estatales más estrictas en medio de una creciente propagación del coronavirus, la alcaldesa de Las Vegas, Carolyn Goodman, llamó al gobernador Steve Sisolak “un dictador”.

“Ha sido un dictador al que hemos obedecido en cada paso del camino”, declaró Goodman. “No hemos tenido elección”.

Goodman ha sido tal vez la crítica más visible del estado de las fuertes restricciones destinadas a frenar el brote, pero expresó una creciente frustración con el gobernador después de que emitiera una orden el domingo de que los casinos, restaurantes y bares redujeran su capacidad del 50 al 25 por ciento a partir del martes.

“Obviamente esto fue aplastante para la ciudad”, mencionó en una larga entrevista telefónica con el Las Vegas Review-Journal.

Goodman añadió que ya ha sido bastante difícil para las pequeñas empresas sobrevivir a la mitad de su capacidad y que prevé medidas más fuertes después de la “pausa estatal” de tres semanas porque el COVID-19 no se mitigará realmente hasta que haya vacunaciones generalizadas.

“Ha intentado todas estas medidas, y aún está aquí”, señaló.

Sisolak pide unidad

La reprimenda más contundente de Goodman al gobernador (dos veces lo llamó “dictador”) fue cuando dijo que no considera ninguna información que esté en desacuerdo con él o con sus asesores, ni se dirige a los alcaldes para pedirles consejo. Si Sisolak hablara con ella, dijo Goodman, ella articularía cómo las restricciones son devastadoras para los residentes.

Sin embargo, la ciudad de Las Vegas forma parte de la Southern Nevada Regional Recovery Organization, que informa semanalmente al comando del estado del coronavirus.

En una declaración, Sisolak reveló que el estado ha trabajado con los municipios y condados durante toda la crisis y señaló que la ciudad ha incumplido rutinariamente con las medidas de inspección de cumplimiento de las empresas, tal y como acordó junto con otros gobiernos del sur de Nevada en la organización de recuperación.

“Sin embargo, cuando los líderes electos de Nevada hablan, sus palabras tienen peso, y estos tiempos difíciles requieren que nuestros líderes se unan para proteger al público”, señaló. “No haré más comentarios sobre la declaración de la alcaldesa. El estado seguirá trabajando con todos los gobiernos locales directamente y a través de sus representantes organizativos, como la Liga de Ciudades y Municipios de Nevada, como lo hemos hecho durante toda la pandemia”.

El gobernador tuvo una respuesta similar sobre el peso de las palabras utilizadas por los funcionarios electos en abril después de castigar a Goodman por sus apariciones en televisión nacional en las que, en parte, ofreció a la ciudad como grupo de control para comprobar si el distanciamiento social era efectivo.

“El mensaje confuso que envió es preocupante”, dijo Sisolak en ese momento.

El condado cerró la mayoría de los edificios

La orden de Sisolak de intensificar las reglas sobre el uso de cubrebocas y reducir el tamaño de las multitudes se produjo en medio del aumento de los casos de COVID-19 y las hospitalizaciones.

“Mi objetivo es tratar de atacar agresivamente esta propagación, mientras mantengo una parte de nuestra economía y nuestra vida cotidiana”, comentó durante una dirección virtual.

En respuesta, el Condado Clark cerrará la mayoría de sus edificios al público a partir del martes, y las reuniones celebradas en su centro de gobierno serán cambiadas a formatos virtuales o canceladas, aseveraron funcionarios.

Habrá algunas excepciones a los cierres: El Aeropuerto Internacional McCarran y el University Medical Center permanecerán abiertos.

“Con el anuncio del aumento de las restricciones centradas en las empresas y en las reuniones públicas y privadas, es imperativo que sigamos haciendo lo que sea necesario para mitigar la propagación del virus en nuestro lugar de trabajo, tanto para los empleados como para el público”, mencionó la gerente del condado, Yolanda King, en un comunicado.

Además de mantener abiertos el aeropuerto y el hospital, el condado afirmó que la Marriage License Bureau, los espacios de parques al aire libre, los parques infantiles y los limitados tipos de procedimientos de casos en los tribunales del condado también se mantendrán intactos.

Pero los parques y centros de recreación del condado operarán a una capacidad del 25 por ciento, y todos los torneos en las instalaciones del condado han sido cancelados hasta nuevo aviso. No se aceptarán reservas de grupo en los parques.

Las reuniones de la Comisión del Condado ahora también se llevarán a cabo virtualmente.

Pese a los cierres, el condado anunció que los empleados permanecerán disponibles para comunicarse con los residentes por teléfono o correo electrónico.

Las ciudades reaccionan

Los funcionarios de Henderson dijeron el lunes que limitarán la ocupación en el Ayuntamiento al 25 por ciento.

“Estamos exigiendo que todo empleado que pueda teletrabajar lo haga, pero hay algunos empleados que no pueden trabajar a distancia y este cambio les permitirá seguir trabajando y prestando servicios a la comunidad”, mencionó la vocera de la ciudad, Kathleen Richards, en un comunicado.

En Las Vegas, el vocero de la ciudad, Jace Radke, agregó que la capacidad de las cámaras del concejo se reduciría a 50 de 98, y el ayuntamiento permanecería abierto con la aplicación de las directrices de salud pública.

North Las Vegas cerró su ayuntamiento al público este mes después de que Sisolak instó a los habitantes de Nevada a quedarse en casa tanto como fuera posible. El edificio permanecerá cerrado al público en general, pero se podrá acceder a los servicios con cita previa o en línea, indicó el gerente de la ciudad, Ryann Juden.

La reunión de la comisión de planificación de diciembre y la primera reunión del Concejo de la Ciudad se llevará a cabo de forma virtual, añadió Juden.

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