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Cadena de tiroteos en North Las Vegas reclama varias víctimas

Cinco veces en poco más de tres semanas, balas volaron en North Las Vegas, dejando atrás a siete víctimas menores de 20 años.

Cuatro murieron y tres resultaron heridos en los tiroteos entre el 30 de octubre y el sábado. La víctima más joven fue de 3 años y la mayor de 19, de acuerdo con los registros mantenidos por el Las Vegas Review-Journal.

En respuesta, el Departamento de Policía de North Las Vegas ha incrementado las patrullas en algunos “puntos calientes”, según el portavoz Aaron Patty. Dos de los recientes tiroteos, por ejemplo, sucedieron aproximadamente a una milla uno del otro.

“Los oficiales hacen un punto para patrullar esas áreas y ser un elemento disuasivo, en todo caso, para que la gente sepa que estamos en la comunidad”, señaló Patty.

Mencionó el domingo que los detectives no pudieron identificar una razón detrás del aumento en los tiroteos con personas más jóvenes.

“Pero diré esto: en la mayoría de estos eventos, las víctimas y los sospechosos eran conocidos entre sí”, describió. “Eso es diferente de un crimen de oportunidad promedio, como un robo o asalto. Por la razón que sea, estas personas han decidido tomar cartas en el asunto con su propia mano”.

Algunos tiroteos sin resolver

Uno de los tiroteos fue motivado por la violencia entre pandillas, tres fueron ataques dirigidos y uno pareció ser accidental, sucediendo después de que un niño de 3 años de edad el 10 de noviembre encontrara un arma de fuego que no estaba debidamente bloqueada, dijo la policía.

La serie de tiroteos comenzó el 30 de octubre en la cuadra 3300 de Civic Center Drive, donde Keimarre Galvin, de 18 años, recibió un disparo mortal en el exterior de un apartamento. El asesinato quedó sin resolver.

Dos días después, un disparo fallido de represalia de pandillas apuntó erróneamente a la casa de la familia Erives en 6705 Courtney Michelle St., mientras que Angelina Erives, de 11 años, estaba trabajando en un proyecto de ciencia con su familia en su cocina. Más de 20 balas atravesaron el frente de su casa, pero Angelina fue la única afectada.

Cuando los sospechosos huyeron en un Nissan Altima, un vecino le disparó al auto y golpeó a uno de los sospechosos. Guy Lee Banks III, de 19 años, murió en un hospital y su muerte fue declarada homicidio por la oficina forense del Condado de Clark.

Tres de los cuatro sospechosos sobrevivientes, todos entre los 16 y 20 años, han sido arrestados y acusados. El último sospechoso no estuvo bajo custodia el domingo, comunicó Patty.

Tres días después, LaMadre Harris, de 16 años, fue asesinado a tiros en el estacionamiento de un centro comercial cerca de Centennial Parkway y Goldfield Street, a una milla de la casa de los Erives.

Patty confirmó que, aunque están cerca, los detectives no tienen razón para creer que los disparos estén relacionados. Pero la policía sospecha que LaMadre fue el objetivo.

LaMadre era un junior en la preparatoria Legacy. Durante un velorio al día siguiente del asesinato, su familia lo describió como un “joven normal que hacía cosas de 16 años”.

La semana pasada, el Departamento de Policía del Distrito Escolar del Condado de Clark se acercó a la policía de North Las Vegas, destacó Patty, pidiendo que los departamentos trabajaran juntos para combatir la actividad de pandillas en las escuelas. Se negó a dar más detalles, pero indicó: “Planeamos reunirnos para discutir qué podemos mejorar”.

Una solicitud de comentarios de la policía del distrito escolar no fue devuelta el domingo.

El tiroteo más reciente ocurrió el sábado en la cuadra 3600 de Hamlin Place. Una menor de 9 años y otro de 15 fueron impactados cuando al menos dos hombres dispararon por la puerta principal de una residencia. Se esperaba que sobrevivieran.

Patty comentó que los padres deben desempeñar un papel clave en la prevención de la violencia contra los niños.

“Necesitamos que enseñen a sus hijos dentro de las paredes de sus propios hogares lo que está bien y lo que está mal”, destacó. “Si no van a hacer eso, los niños pueden buscarlo en otra persona, que generalmente proviene de sus compañeros o, a veces, desafortunadamente, de las pandillas”.

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