Carolyn Goodman llega a su tercer mandato como alcaldesa de Las Vegas

La alcaldesa de Las Vegas, Carolyn Goodman, se adjudicó una victoria aplastante el martes por la noche, superando a otros seis aspirantes con el 83.5 por ciento de los votos en su camino hacia un tercer y último mandato.

Goodman estuvo notablemente ausente de la fiesta de la noche de las elecciones en Oscar Steakhouse. La alcaldesa, que el viernes se sometió a su cuarta ronda de tratamiento de quimioterapia para el cáncer de mama en etapa 2, votó el martes temprano en el ayuntamiento de Las Vegas y luego asistió a un evento de campaña separado.

Pero se sentía “un poco cansada” antes de su celebración prevista el martes por la noche, comentó su esposo, el ex alcalde Óscar Goodman, al diario Las Vegas Review-Journal. Así que él se quedó en su lugar.

“Es realmente una mujer de valor”, describió Óscar Goodman, con un martini a su lado. Señaló que no se había perdido “ni un solo segundo de trabajo” y que estaría en la reunión del Concejo Municipal de Las Vegas el miércoles.

Carolyn Goodman, de 79 años, dirigió su campaña con una fuerza constante en la política de Las Vegas, buscando “estabilizar lo que tenemos y mejorarlo”. Su triunfo el martes por la noche puso el tope a casi un cuarto de siglo de “Goodmans” a la cabeza, igualando el mandato de tres años de su esposo Óscar que comenzó en 1999.

“Es sorprendente”, mencionó Óscar Goodman en su fiesta electoral.

Carolyn Goodman ha hablado de querer dejar a Las Vegas como una ciudad con sólidas oportunidades de trabajo, educación justa para todos, atención médica de calidad y parques accesibles (convertirla en una de clase mundial de calidad), al tiempo que reconoce que “aún no hemos llegado ahí”.

Las metas inmediatas para su tercer término incluyen un circuito de transporte gratuito que trasladará a las personas a través del centro, viviendas para personas sin hogar y una cooperación renovada con el Condado de Clark para resolver el problema de la falta de vivienda.

“Imaginen el 1 de octubre”, indicó Óscar Goodman en un micrófono en la fiesta, poco antes de apagar las velas de un pastel en su honor. “Imaginen el mundo entero mirando a Las Vegas y a las 58 almas inocentes que se perdieron ese día e imaginen no haberla tenido para guiarnos con dignidad, respeto y con todo lo que uno quisiera de alguien que representa a una ciudad. Mi esposa lo hizo y es por eso que creo merecía tener los votos que tuvo esta noche”.

Seis aspirantes intentaron reemplazar a Goodman, todos menos conocidos: la CEO Tina Rane Alexander, el veterano de la Marina: Phil Collins, el trabajador de la industria de la marihuana: Zachary Krueger, la consultora de negocios: Amy Luciano, el pequeño empresario: Mack Miller y el ministro: Vance “Stretch” Sanders.

Collins fue el competidor más cercano de Goodman, con un 5.3 por ciento de los más de 26 mil 700 votos obtenidos. La siguiente más cercana fue Luciano, con alrededor del 3 por ciento.

Óscar Goodman le declaró al Review-Journal que la muy disputada carrera del Distrito 3 entre la ex asambleísta Olivia Díaz y el ex representante, Ruben Kihuen, no se le había pasado por la cabeza.

“No lo veía venir”, concluyó.