El descenso del nivel de agua del lago Powell preocupa a un pueblo de Arizona
PAGE, Ariz. — Los signos de la sequía aparecen casi inmediatamente en el camino hacia la bahía de Wahweap del lago Powell.
Las rocas que antes estaban bajo el agua aparecen ahora en la superficie del lago. Una franja blanca en las paredes del cañón detrás de la presa de Glen Canyon marca el lugar al que llegó el nivel del lago.
Las personas que conocen el lago Powell no son ajenas a las fluctuaciones del nivel del agua. Pero este año, el descenso del nivel del lago llevó al segundo embalse más grande del país a un mínimo histórico, y con ello, a varios desafíos para quienes gestionan el río Colorado y dependen del lago Powell para su subsistencia.
“Es realmente dramático”, dijo Heiji Klotzbach sobre el descenso de este año. “Porque antes, cuando mirabas al otro lado, todo esto era agua”.
Este residente de Prescott, Arizona, de 70 años, contempló la extensión de roca expuesta desde la cima de la última rampa para barcos que queda en Wahweap, una pendiente que tuvo que bajar para llegar a su familia y pasar un día en el agua.
Es aquí donde se encuentra una señal de la más reciente amenaza de una sequía de dos décadas en el embalse que se extiende por el norte de Arizona y el sur de Utah.
“Prohibido navegar casas flotantes”, reza un tablón de anuncios electrónico.
La economía “está cayendo en picado”
Este mensaje ha obligado a Bill West a mantener su inventario de casas flotantes fuera del agua. Las embarcaciones se encuentran ahora en dique seco en un patio detrás de la oficina de su empresa en Page, una pequeña ciudad que sirve de centro para el turismo en el lago Powell.
Desde el último día en que pudo navegar un barco, a mediados de julio, la empresa de West, Laketime, especializada en casas flotantes de propiedad compartida, ha dejado de percibir unos 300 mil dólares semanales durante su temporada alta, detalló.
El lago Powell tiene 11 rampas de lanzamiento a su máxima altura, unos 3,700 pies. En la actualidad, el lago solo cuenta con una rampa plenamente operativa en Bullfrog Bay, a unas cinco horas de Page.
En la bahía de Wahweap, la zona de mayor afluencia de visitantes, solo queda abierta una rampa pública, pero las casas flotantes de gran tamaño no pueden utilizarla.
Se espera que el nivel del agua descienda hasta un nivel que haga que la rampa principal de la bahía de Wahweap quede completamente inutilizada en unas dos semanas.
Y mantener el acceso a la bahía de Wahweap es crucial para Page.
Soluciones temporales
William Shott, superintendente del Glen Canyon National Recreation Area, sabe que la perspectiva de perder la rampa principal de la bahía de Wahweap está causando consternación en la comunidad.
Todo el concreto de la rampa está ahora fuera del agua, por lo que las esteras de tuberías temporales están ampliando la zona de lanzamiento.
Si el nivel del lago desciende unos pies más, la rampa no podrá ampliarse porque la zona cae en un cañón, dijo Shott.
Dijo que una vez que quedó claro este año que las proyecciones del nivel del agua estaban empeorando, el servicio de parques identificó un objetivo: mantener un acceso mínimo al lago Powell. Eso significa tener una rampa utilizable en la zona de Bullfrog Bay y Hall’s Crossing y otra en la zona de Wahweap.
Los responsables del parque encontraron una zona en la bahía de Wahweap que podría soportar una rampa, dijo Shott, así que empezaron a investigar más a fondo y encontraron registros de una rampa que probablemente se construyó en algún momento a mediados de la década de 1960.
Ahora hay planes para construir esa rampa, y Shott espera que pueda abrirse para el Día del Trabajo. Hasta el martes, el servicio de parques pensaba que la mayoría de los navegantes no podrían acceder a la bahía de Wahweap desde una rampa de lanzamiento durante semanas.
El alcalde de Page, Bill Diak, expresó su frustración por el hecho de que los planes para hacer frente al descenso del nivel del agua se hayan desarrollado recientemente.
“¿Cuánto tiempo llevamos hablando de una sequía para el lago Powell y el lago Mead?” dijo Diak el miércoles. “¿Veinte años? ¿Y nadie vio venir esto?”.
Shott dijo que el servicio de parques comprende la importancia del lago como motor económico de la comunidad, y sus empleados están haciendo todo lo posible para mantener el acceso.
Liberaciones adicionales
Hace menos de un año, las proyecciones del U.S. Bureau of Reclamation indicaban que el lago Powell estaría en medio de un año normal, dijo Shott. Pero poco a poco, las proyecciones del nivel de agua comenzaron a mostrar un panorama sombrío.
“Si me dijeran el 1º de enero de este año que estaríamos teniendo esta conversación hoy, me quedaría realmente sorprendido”, dijo Shott.
Becki Bryant, portavoz de la oficina de Upper Colorado Basin, dijo que la combinación de una menor cantidad de nieve, temperaturas más altas, menos precipitaciones y suelos secos que absorben la escorrentía han provocado que fluya menos agua en el sistema del río Colorado.
En el caso del lago Powell, eso significa 2.5 millones de acres-pies menos de agua de lo que se esperaba en los primeros seis meses del año. El embalse está lleno en un tercio, y se prevé que los niveles del lago sigan disminuyendo hasta que comience la temporada de escorrentía la próxima primavera.
El descenso del nivel del agua llevó a los funcionarios federales a anunciar a mediados de julio que el gobierno tomaría la medida sin precedentes de liberar agua adicional de los embalses aguas arriba para rellenar el lago Powell.
Las descargas de agua de los embalses de Flaming Gorge, Navajo y Blue Mesa aumentarán el nivel de agua del lago Powell en aproximadamente tres pies.
El objetivo es mantener un colchón de la elevación mínima del lago que permita la generación de electricidad en la presa de Glen Canyon, una de las principales fuentes de energía para el Oeste.
Cambios operativos
Incluso con el agua adicional que se libera en el lago Powell este año, las proyecciones federales muestran que el nivel de agua del embalse alcanzará un mínimo de 3,516 pies en abril. Esos niveles comenzarán a subir cuando comience la escorrentía de primavera.
Se espera que las proyecciones del nivel de agua que se publicarán el 16 de agosto desencadenen cambios a lo largo del río Colorado.
En la Upper Basin, se espera que el lago Powell reduzca sus descargas a la Lower Basin en 750 mil acres-pies. Un acre-pie de agua es más o menos lo que consumen dos hogares del Valle de Las Vegas en 16 meses.
Y en la Lower Basin, también se espera que los usuarios vean recortadas sus asignaciones de agua fluvial en virtud de una alerta de escasez. La asignación de 300 mil acres-pies de Nevada se reducirá en 21 mil en virtud de dos acuerdos fluviales.
En conjunto, la Lower Basin reducirá su asignación de agua fluvial en 613 mil acres-pies, según la Bureau of Reclamation.
Aunque las condiciones desfavorables de la sequía han puesto a prueba al río Colorado, Martin dijo que hay que centrarse en la cantidad de agua que se utiliza.
El acuerdo original que estableció las asignaciones del río Colorado sobrestimó la cantidad de agua que el río podría proporcionar, señaló.
La asignación excesiva aguas abajo es evidente, explicó, porque la presa Glen Canyon sigue liberando la cantidad de agua exigida, pero el nivel del agua del lago Mead sigue disminuyendo.
Pero no debería recaer en un solo estado o grupo el cambio de rumbo, dijo Martin.
“Tenemos que unirnos todos para arreglar esto”, pidió.
