77°F
weather icon Partly Cloudy

Explosión en dormitorios de la UNR fue provocado por un calentador averiado

CARSON CITY — Un informe largamente esperado sobre la explosión de los dormitorios del 5 de julio en la Universidad de Nevada, campus Reno (UNR), confirma los informes iniciales de que una “falla catastrófica” en el calentador del edificio desencadenó una serie de eventos que provocaron dos explosiones consecutivas.

Pero la investigación no pudo determinar la fuente de la segunda explosión (la más dañina) que hirió a ocho personas, incluidos seis estudiantes, en el par de explosiones en la sala de calentadores del dormitorio Argenta Hall.

Un resumen del informe del jefe de bomberos del área y el Departamento de Seguridad Pública del estado, publicado el jueves por la tarde, señala que el calentador entró en “modo seguro” el 1º de julio, varios días antes de la explosión, lo cual indica un problema. Un técnico de servicio diagnosticó un servomotor defectuoso en el calentador y lo apagó hasta que se pudo instalar la pieza de repuesto.

Las explosiones ocurrieron cuando se realizaron los trabajos de reparación el 5 de julio. La primera ocurrió alrededor de las 12:47 p.m., cortando una línea de gas natural de tres pulgadas.

“Esta primera explosión resultó en un incendio, alimentado por el gas natural que subió por la pared a la izquierda del calentador”, dicta el resumen del informe. Ese incendio activó una alarma y fue extinguido por el sistema automático de extinción de incendios. El técnico apagó el gas, pero se había escapado lo suficiente como para alimentar la segunda explosión, según el informe.

“El gas natural de la tubería cortada ya había permitido que aproximadamente seis mil pies cúbicos de gas inflamable ingresaran al área del sótano”, según el informe. “El gas natural llenó los primeros pisos y el hueco del ascensor adyacente al calentador”.

El gas fue encendido por “una de varias fuentes potenciales de ignición”, lo que causó la segunda y más grande explosión. Esas posibles fuentes pudieron haber sido el equipo de cocina de la cafetería, el equipo de lavandería del dormitorio, el funcionamiento de las cabinas de los ascensores o “una fuente de ignición de algún inquilino no especificada”.

En el informe de investigación, Eric Guevin, jefe de bomberos del Distrito de Protección contra Incendios de Tahoe Douglas, describió la serie de eventos previos a la explosión con mayor detalle.

El técnico del calentador indicó que reemplazó la parte rota, pero el calentador “no estaba funcionando correctamente” y lo apagó. Luego, vio un “muro de fuego ‘similar aun lanzallamas’ y el calentador explotó”.

El técnico salió corriendo del área del calentador y le gritó a la gente que evacuara e hiciera sonar la alarma, luego fue a cerrar la llave de gas fuera del edificio con la ayuda de un trabajador de mantenimiento de la UNR. El trabajador había escuchado la explosión y “pensó que el técnico estaba muerto”.

La segunda explosión ocurrió aproximadamente cuando los bomberos de Reno llegaron justo después de la una de la tarde, lo que llevó a los investigadores a creer que el gas fluyó a través del edificio durante 17 minutos.

Guevin citó cuatro eventos distintos:

■ Se originó una falla mecánica en el calentador mientras se instalaba la nueva pieza.

■ Un “gran incendio de gas” de la explosión inicial que cortó otra tubería de gas.

■ El flujo libre de gas después del incendio inicial fue extinguido por los rociadores.

■ La segunda explosión ocurrió cuando el gas exterior fue encendido por una fuente de ignición desconocida.

En una declaración, el presidente de la UNR, Marc Johnson, destacó que el informe dejaba claro “que todos los aspectos de este incidente fueron considerados y que estaban involucradas las mejores personas con el conocimiento necesario para una investigación exhaustiva”.

“Hemos estado esperando ansiosamente este informe y ahora podemos entender mejor los eventos que llevaron a este evento sin precedentes”, concluyó. “Somos muy afortunados y agradecidos de que si bien hubo heridas leves, no hubo víctimas mortales, y la explosión no fue criminal o relacionada con terrorismo”.

Al momento de la explosión, el Argenta Hall albergaba a unos 400 estudiantes de verano. El dormitorio adyacente de Nye Hall también resultó dañado.

Ambos edificios permanecerán cerrados por reparaciones durante todo el año académico actual. La UNR espera reabrir Nye Hall en 2020 y Argenta Hall en 2021. Mientras tanto, la UNR acordó que unos mil 300 estudiantes normalmente alojados en los dos dormitorios, vivan en la Sky Tower del Circus Circus de Reno, aproximadamente a media milla del campus.

Los calentadores en Argenta Hall habían sido inspeccionados más recientemente en enero de 2018 y no tenían antecedentes de violaciones, según la página de preguntas frecuentes de la UNR sobre la explosión y sus consecuencias.

LO ÚLTIMO