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Fallece querida profesora de la UNLV a causa del COVID-19

Durante los años 70, a principios de lo que se convertiría en una carrera de 58 años en la UNLV, Felicia Campbell y varios otros profesores presentaron una demanda por discriminación contra la universidad que implicaba la igualdad de remuneración. Años más tarde, Campbell finalmente, pero a regañadientes, aceptó un acuerdo.

Y con ese dinero, Campbell financió un viaje al campamento base del K2, la segunda montaña más alta de la Tierra.

“Pensé que, a los 52 años, era demasiado vieja y que no sobreviviría”, le comentó Campbell al Review-Journal en 2016, pero la aventura “fue maravillosa. Volví siendo otra persona, lo cual fue muy bueno”.

Ese mismo sentido de la aventura y el pensamiento creativo fueron los sellos distintivos de la carrera de Campbell como profesora de inglés en la UNLV, donde ayudó a legitimar la disciplina académica de la cultura pop y acogió nuevas voces literarias y géneros literarios como la ciencia ficción mucho antes de que se volvieran populares.

Por encima de todo, Campbell era una profesora muy querida y entusiasta, reveló el profesor asociado de historia de la UNLV, Michael Green, un colega y amigo.

“Los estudiantes la amaban porque era muy centrada en ellos”, dijo Green. “Ella estaba ahí para ellos y no quería enseñar nada que no disfrutaran, así que transmitía ese gozo”.

Campbell murió el 27 de julio por complicaciones de COVID-19, según su hija, Tracy Tuttle, cuyo anuncio de la muerte de Campbell en Facebook la semana pasada trajo docenas de recuerdos de antiguos estudiantes, amigos y colegas.

“Hay ciertas personas que crees que van a estar por siempre”, dijo Green.

Campbell nació en Cuba City, Wisconsin. Obtuvo una licenciatura y una maestría en la Universidad de Wisconsin, Madison, y un doctorado en la Universidad Internacional de Estados Unidos. Sirvió brevemente en el Cuerpo de Marines como parte de su primera clase de candidatas a oficial, pero decidió volver al mundo académico, incorporándose en 1962 al cuerpo docente de lo que entonces era la División Regional del Sur de la Universidad de Nevada.

El campus entonces consistía en un puñado de edificios y mucho espacio sin construcciones, recordó Green. “Vino aquí como una joven soltera, en parte por un sentido de aventura, en parte por el trabajo, y nunca perdió su sentido de aventura o independencia”.

Campbell fue la primera profesora de la UNLV que enseñó literatura afroamericana y asiática e integró en el programa inglés de la UNLV la ciencia ficción, la cultura y literatura pop sobre la teoría del caos, según Jennifer Keene, decana del Colegio de Artes Liberales de la UNLV.

Durante muchos años, Campbell también hizo reseñas semanales de libros en KNPR-FM, presentando a los nevadenses del sur a todo el mundo, desde los autores más prometedores hasta las primeras obras de J.K. Rowling.

Bob Coffin, ex concejal de la ciudad de Las Vegas y legislador de Nevada, cursó dos semestres de literatura estadounidense con Campbell en 1967 y 1968.

“Definitivamente fue una profesora inspiradora”, describió. “Trabajó más duro que cualquier otro profesor que haya conocido”.

Campbell “pasó el tiempo presentándonos a gente que no era conocida. Tenía el don de ver quién sería conocido más tarde”, dijo.

Campbell sugirió una vez que Coffin escribiera un artículo sobre Kurt Vonnegut Jr. Coffin tuvo problemas para encontrar información sobre Vonnegut, que entonces era “todavía nuevo y una especie de novelista de vanguardia”.

En su desesperación, días antes de que tuviera que entregar su trabajo, Coffin consiguió un número telefónico a través del editor de Vonnegut, llamó al autor y habló con él durante media hora.

Terminó el trabajo y Campbell estaba tan contenta con la historia que había detrás que, según Coffin, “nunca se cansó de (contar) esa historia durante 50 años”.

Los preparativos para el funeral aún no se han completado, según Keene. En una publicación en el perfil de Facebook de Campbell, su hija escribió: “No sólo le sobreviven sus hijos, nietos y bisnietos, sino también todos ustedes. Su impacto fue interminable y se le extrañará tremendamente”.

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