Jueza de Las Vegas demanda al tribunal disciplinario de Nevada
Una jueza de Las Vegas que se enfrenta a acusaciones de ética ha volteado la mesa contra la junta de supervisión judicial del estado, presentando una demanda federal que alega conspiración, un perjuicio continuo contra ella y violaciones de sus derechos constitucionales.
En una demanda de 68 páginas presentada el viernes, los abogados de la jueza de paz, Melanie Tobiasson, acusan a la Nevada Commission on Judicial Discipline (NCJD) de burlarse de sus propios reglamentos y procedimientos en un esfuerzo por desacreditar a la jueza.
“Sus acciones son constitucionalmente violatorias y fueron deliberadamente emprendidas para suprimir la libertad de expresión de una jueza debidamente elegida y para infringir sus derechos al debido proceso a través de medios artificiales y de represalia que abusaron del proceso contra los derechos de la demandante como persona, madre y funcionaria judicial”, afirma la demanda. “Las acciones de los demandados son inconstitucionales y restringen directamente los derechos constitucionales de la demandante”.
La presentación de los abogados Marc Cook y Thomas Sheets alega difamación, violaciones constitucionales, prejuicios de género, conspiración e imposición intencional de angustia emocional. Refleja una apelación que Tobiasson hizo ante el Tribunal Supremo de Nevada el año pasado. Ella había pedido al alto tribunal que desechara los cargos de la comisión que alegaban que había interferido en una investigación de asesinato.
Esa petición fue denegada, después de que el Tribunal Supremo decidiera que la comisión debía seguir presentando cargos. Sin embargo, a finales del año pasado, la comisión aplazó la vista sobre ocho cargos contra la jueza expuestos en 16 alegaciones distintas.
La comisión ha alegado que Tobiasson instó a los detectives del Departamento de Policía Metropolitana a investigar una tienda de ropa en la que trabajaba su hija. Tobiasson creía que la tienda era una fachada para un club sin licencia donde los adolescentes bebían, consumían drogas y se dedicaban a la prostitución.
Sus abogados escribieron que la denuncia contra Tobiasson estaba “llena de teorías ficticias” y “carente de datos concretos”.
“La conducta del NCJD en este asunto ha demostrado una negación del debido proceso, aunque sea mínimo, por parte de un organismo adjudicador, incluyendo la notificación y la oportunidad significativa de ser escuchado”, alega su demanda federal. “La pérdida del cargo de jueza de paz por cualquier periodo de tiempo constituiría una pérdida grave para el demandante que nunca podrá ser recuperada”.
Los funcionarios de la comisión no han respondido a las repetidas solicitudes de comentarios sobre Tobiasson desde que se hicieron públicas las acusaciones de ética.
