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Alabama puso fin a ley discriminatoria

El estado de Alabama alcanzó el martes un acuerdo con la Unión Americana de libertades Civiles (ACLU) para resolver una demanda interpuesta en contra de la Ley HB 56, una dura iniciativa contra la inmigración indocumentada que tomó como base ley SB 1070 de Arizona.

El arreglo puso fin a la disputa legal y dejó fuera varias partes controversiales, entre ellas una que castigaba severamente a quienes transportaran a indocumentados.

La ley de Alabama, desde que fue aprobada en 2011, fue desmantelada por fallos judiciales que suspendieron temporalmente partes controversiales de la medida.

En noviembre del año pasado la Corte de Apelaciones del 11 Circuito, en Atlanta, Georgia, rechazó un pedido de revisión solicitado por el estado para reconsiderar un dictamen anterior.

En el primer fallo el tribunal simplemente dijo que la apelación no procedía y no dio mayores explicaciones.

Alabama entonces apeló para que el tribunal revisara la decisión.

Bloqueos de 2011

En 2011 un juez federal dictaminó que los funcionarios del estado de Alabama no pueden impedir que los inmigrantes renueven los permisos necesarios para vivir en casas prefabricadas.

Se trató del tercer bloqueo a la cuestionada ley estatal de inmigración considerada por defensores y detractores como la más dura en su tipo en el país.

El juez federal de distrito Myron Thompson emitió una orden de restricción temporal que permite que los residentes del estado de Alabama renueven el registro de viviendas prefabricadas sin necesidad de demostrar que viven legalmente en el país.

Los abogados de una coalición de grupos de derechos civiles habían advertido que, al rechazar la renovación de los permisos, los funcionarios estatales podrían obligar a las personas a abandonar sus viviendas.

La corte dijo que había pruebas suficientes de prejuicios discriminatorios contra los hispanos que justificaban la decisión.

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