Nadie adquirió el Lucky Dragon en Las Vegas por 35 MDD
El principal prestamista del Lucky Dragon realizó una ejecución hipotecaria el martes, abriendo un nuevo capítulo en la corta pero problemática historia del hotel de Las Vegas.
Snow Covered Capital del desarrollador de San Francisco, Enrique Landa, tomó posesión de la propiedad de 2.5 acres en una subasta de ejecución hipotecaria. La oferta inicial fue de 35 mdd, pero nadie hizo una oferta por encima de ese precio.
“Se va a la una, se va a las dos… sin escuchar nada de nadie en la multitud, la propiedad se vende por la presente cantidad” y “vuelve a ser el prestamista”, dijo el subastador David Bark, fideicomisario de la ejecución hipotecaria y abogado defensor de First American Title Insurance Co. “Gracias a todos por asistir”.
La subasta se llevó a cabo en el estacionamiento del edificio Nevada Legal News, 930 S. Fourth St. cerca de Charleston Boulevard. Alrededor de 50 personas asistieron.
El Lucky Dragon de temática china, ubicado en 300 W. Sahara Ave., abrió hace menos de dos años y fue el primer hotel-casino construido desde cero en Las Vegas desde la recesión. Su desaparición fue quizás la más rápida en décadas.
“Se reabrirá algún día”
Landa, socia de Associate Capital, le informó al Review-Journal después de la subasta que el Lucky Dragon de 203 habitaciones “es una propiedad muy bien construida” pero “no tenía el plan de negocios correcto”.
“Creemos que tiene un futuro brillante, y en las manos del operador adecuado, creo que será un gran éxito”, confesó Landa.
Cuando se le preguntó cuándo podría reabrirse, respondió: “No lo sé”.
El desarrollador de Lucky Dragon, Andrew Fonfa, fundador de ASF Realty & Investments, declinó hacer comentarios el martes.
Michael Brunet, un consultor de Snow Covered Capital, reconoció hace unas semanas que los dueños de los casinos rara vez adquieren sus propiedades en las ventas de re-compra, donde un comprador podría tener que retirar decenas de millones de dólares en cheques de caja para una propiedad como Lucky Dragon.
El martes dijo que el hotel-casino fuera del Strip se “comercializó mucho” antes de la subasta y que más de 80 compradores potenciales firmaron acuerdos de no divulgación.
En última instancia, la recuperación fue “no un resultado inesperado”, informó Brunet.
“Vamos a encontrar un nuevo propietario para ello. Se volverá a abrir algún día, y será una propiedad muy exitosa”, afirmó.
Los posibles compradores ahora tienen más tiempo para estudiar la propiedad, organizar el financiamiento y elaborar un plan de negocios, según el corredor de CBRE Group, John Knott, jefe del grupo global de juegos de la firma, que está trabajando con el grupo de Landa para vender el resort.
Rápida llamarada
El Lucky Dragon se inauguró en noviembre de 2016 con su hotel y casino en edificios separados. Pero el complejo, que luchó para atraer a grandes multitudes, cerró su casino y restaurantes en enero, se enfrentó a una ejecución hipotecaria poco después y se declaró en bancarrota en febrero.
Su rápida desaparición se finalizó a principios de octubre, cuando la torre del hotel de nueve pisos clausuró y la propiedad se cerró con cercas de cadenas.
Había signos de problemas financieros incluso antes de que se abriera. Los miembros del Consejo Municipal de Las Vegas, que actuaron como jefes de la agencia de reurbanización de la ciudad, en noviembre de 2015 rechazaron la idea de entregar $25 millones en subsidios que los desarrolladores querían para el proyecto.
El grupo de Fonfa advirtió que podrían tener que retrasar o detener el trabajo sin la ayuda, fue la primera vez que muchos líderes de la ciudad recordaban haber discutido la posibilidad de apuntalar un casino con dinero público, informó el Review-Journal.
Los desarrolladores más tarde obtuvieron préstamos de Snow Covered Capital. Para cuando Fonfa llevó a Lucky Dragon a la bancarrota, al grupo de Landa se le debían casi $50 millones.
