The Center tiene previsto ofrecer servicios de atención a la salud en Las Vegas
La reciente contratación de una ejecutiva en The Center, una organización sin ánimo de lucro que presta servicios a la comunidad LGBTQ+, forma parte de un plan más amplio para ampliar significativamente sus servicios de salud en el centro de Las Vegas.
Mona Lisa Paulo se incorporó a la organización en noviembre como directora de la clínica y de los servicios para el VIH, en su intento de convertirse en un centro de salud federalmente cualificado, un proveedor de atención a la salud basado en la comunidad que recibe fondos de la Administración de Recursos y Servicios de Salud para proporcionar atención primaria en zonas desatendidas.
“Tanto si eres indocumentado como si no tienes ingresos o no tienes seguro, el programa consiste en ayudar a cualquiera que entre por la puerta a recibir cualquier tipo de servicio médico”, dijo Paulo. “Este vecindario ha sido identificado como una comunidad carente de servicios médicos. Tener la clínica aquí y los servicios que proporcionamos solo va a ser decisivo para poder dar acceso a, básicamente, entrar y obtener servicios médicos”.
En la actualidad, el Arlene Cooper Community Health Center, sin ánimo de lucro, se centra en los servicios de asesoramiento y pruebas de VIH, así como en las pruebas de tres infecciones de transmisión sexual comunes, gracias a una asociación con la Huntridge Family Clinic, con sede en Las Vegas. Acepta la mayoría de los seguros, incluido Medicaid, y ofrece una escala de honorarios para los clientes no asegurados.
La organización sin ánimo de lucro tardará unos tres años en convertirse en un centro de salud cualificado por el gobierno federal. Mientras tanto, la organización tiene previsto ampliar sus servicios, como ampliar el horario de la clínica y construir una farmacia in situ, entre otras prácticas.
La ampliación de la clínica también forma parte del plan de la organización sin ánimo de lucro para la sostenibilidad de los fondos, dijo el director de operaciones Brian Hosier.
The Center genera ingresos rentando espacios para eventos y operando una cafetería in situ. También participa en un programa federal de descuento en los precios de los medicamentos. Pero la mejora de los servicios de la clínica aportará ingresos adicionales para mantener sus prácticas, dijo.
Históricamente, la clínica ha sido un lugar para que la comunidad LGBTQ+ reciba atención sin prejuicios, dijo Hosier. Los activistas y los proveedores hacen preguntas sin rodeos para ofrecer la mejor atención posible, y su reputación de confianza ha llevado a personas más allá de la comunidad homosexual a buscar allí atención relacionada con el VIH, según Hosier.
Las tácticas de reducción de daños, como los programas de intercambio seguro de agujas, una máquina expendedora de Trac-B que dispensa kits de higiene, pruebas de embarazo, medicamentos para revertir las sobredosis de opiáceos y otras cosas, han contribuido a ampliar la comunidad a la que sirve el dispensario.
“Hay algunos atributos únicos para atender a nuestra comunidad”, dijo Hosier. “Creemos que estamos bien posicionados para asegurarnos de que proporcionamos lo que necesita la comunidad LGBTQIA+, así como la comunidad en su conjunto. Tenemos que ser buenos vecinos y parte de ese plan es ayudar a las personas que tienen una gran necesidad de atención médica, o de servicios de salud mental, o lo que sea, y no tienen los medios o el transporte para llegar a eso”.
