Vale la pena esperar por el proyecto de optimizaciones de transporte del Estadio Allegiant
Con la reunión pública final pronto a suceder, un importante proyecto de carreteras que ayudará a mejorar el tránsito hacia y desde el Estadio Allegiant, comenzará en 2021, un año después de la apertura de las instalaciones.
El proyecto de intersección de 200 millones de dólares entre la Interestatal 15 y la Avenida Tropicana ha sido anunciado como un importante proyecto de optimización de carreteras para los días de partidos y eventos, pero muchos de los habitantes de Las Vegas se han quejado de que el proyecto no comenzará hasta un año después de que el estadio empiece a funcionar y no está programado para su finalización hasta el otoño de 2024.
Se proyecta que los días de juego y los principales eventos en el estadio con capacidad para 65 mil personas, traerán de 15 mil a 18 mil vehículos adicionales al sistema de carreteras en las cercanías, según el Departamento de Transporte de Nevada.
El proyecto estaba en marcha incluso antes de que se hablara de la reubicación de los Raiders en Las Vegas, y no crea ningún impacto fiscal adicional para el Departamento de Transporte Estatal (NDOT, por su sigla en inglés). Pero la línea de tiempo se aceleró una vez que el estadio de dos mil millones de dólares, cerca de la I-15 y Russell Road, se convirtió en una realidad.
El plan combina dos proyectos planificados por separado, la optimización de la intersección Tropicana y la adición de rampas de entrada y salida para vehículos de alta ocupación en Harmon Avenue. Las rampas de acceso directo para vehículos de alta ocupación de Hacienda Avenue (previamente planeadas) que debían combinarse con las rampas Harmon, fueron omitidas después de que Hacienda fuera designada para su uso como vía peatonal durante los días de eventos.
Ruta principal al estadio
El proyecto está posicionado para ser un importante acercamiento norte-sur para el tránsito del estadio, ya que Dean Martin Drive será reconstruida en la I-15 y ya no tendrá una intersección señalizada en Tropicana, donde se encuentra In-N-Out Burger. Esa zona ya se congestiona demasiado en un momento dado, sin que las multitudes de espectadores se sumen a la carga de tráfico.
Los carriles triples a la derecha y a la izquierda en la rampa de salida norte de Tropicana hacia la I-15 y la adición de un carril en cada dirección en Tropicana, limitarán la congestión del paso superior, de acuerdo con el gerente de proyecto del NDOT, Jeff Lerud.
Durante la construcción, el NDOT planea detener labores durante eventos importantes en el estadio para aliviar los problemas de tráfico. Estos incluirán 10 partidos en casa de los Raiders, seis partidos en casa de la UNLV y unos 46 eventos más cada año, según las proyecciones de los Raiders.
“El control efectivo del tráfico será fundamental para el éxito de este proyecto”, mencionó Lerud.
El estadio no es la única área que se beneficiará de la reconstrucción de la intersección Tropicana, la primera actualización importante del distribuidor desde la década de 1960, según el NDOT.
El flujo de tránsito hacia Las Vegas Boulevard y el corredor de los hoteles a lo largo del Strip mejorará desde la I-15, junto con el flujo peatonal hacia T-Mobile Arena.
También se beneficiará la T-Mobile Arena
Las aceras de Tropicana en la I-15 se ensancharán de cinco a 10 pies, y se construirá una nueva pasarela peatonal desde el lado norte de Tropicana hasta Frank Sinatra Drive, abriendo un nuevo punto de acceso a T-Mobile.
“Habrá escaleras que te llevarán desde Tropicana hasta Dean Martin en el lado oeste y Frank Sinatra en el lado este”, concluyó Lerud.
Junto con los detalles inmediatos del proyecto, la futura ampliación de la I-15 en la zona también será posible con el proyecto.
El proyecto también incluye mejoras en los paisajes, algunas de las cuales serán obras de arte. Algunas de las obras de arte serán similares a obras que ya se encuentran en el área del estadio y que podrían ser interpretadas erróneamente como representantes de uno de los rivales más encarnizados de los Raiders.
“Tenemos caballos que podrían ser malinterpretados como Broncos, y tú tienes el estadio justo ahí”, bromeó Lerud. “Vamos a echarle un ojo a eso”.
Al final, los pocos años de tratar con la construcción del proyecto valdrán la pena una vez que esté terminado. En ese momento, el plan de transporte del estadio tendrá una duración de tres años, tiempo en el que se habrán solucionado los problemas que surjan. Las adiciones del proyecto Tropicana de 200 millones de dólares harán que el traslado sea mucho más simple.
