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Un oficinista en un quinto piso durante un temblor

Un lector se quedó en el quinto piso de un edificio mientras temblaba el martes 19, y trató de razonar acerca de qué hacer en ese momento de pánico. Pasado el susto, escribió y me mandó estas líneas en tercera persona:

Es de alabarse la solidaridad y organización mostrada por miles de voluntarios ante el catastrófico sismo reciente. Todos felicitamos a todos. Sin embargo, sería muy oportuno hacer ahora una reflexión sobre el confuso sistema de instrucciones e instructivos, anuncios y carteles que despliegan las autoridades de Protección Civil.

Basta hacerle a un oficinista que despacha en un quinto piso la pregunta más sencilla en estas circunstancias: Si comienza a temblar con fuerza, ¿usted qué hace: abandona el edifico o no?

No hay ninguna respuesta clara para esta pregunta. En las paredes hay vistosos letreros con dibujos verdes que dicen qué hacer en caso de sismo.

·No corra, no empuje, no grite

De acuerdo, está bien, no hay que hacerlo, pero ¿abandono el edificio o no?

·No usar elevadores dice el símbolo del cartel. Pienso, entonces, debo usar las escaleras. Sigo sin entender si tengo que quedarme protegido en el piso o abandonarlo por las escaleras.

·Un dibujo esquemático verde muestra un fulano corriendo y dice: Localice la ruta de evacuación más cercana. Ok, la localizo, pero ¿debo abandonar rápidamente el edificio… sin correr ni empujar ni gritar ni usar el elevador?

Leo en internet las indicaciones de Protección Civil y dicen que, en caso de sismo: No utilices elevadores ni escaleras. Pero luego dice: No se apresure al salir (todo esto muy bien etiquetado como lo que hay que hacer durante el sismo).

En un conocido periódico capitalino nos recordaban en su editorial que, si uno está en los pisos muy altos de un edificio, no debe tratar de salir durante el sismo; que hay que permanecer en el lugar y tratar de resguardarse.

Entonces pregunto: ¿qué hago en el quinto piso?

Hablamos por teléfono a Protección Civil de la ciudad y nos dicen que del piso uno al tres se deben evacuar durante el sismo. Los demás no.

La instrucción más célebre que encontré, y que aumenta exponencialmente la confusión, es la de la exitosa conductora Martha Debayle, en Google, que nos dice: “Durante el sismo: evacúa si tienes la posibilidad de hacerlo, si vives en un segundo o cuarto o séptimo piso, ni lo intentes, no tienes tiempo, resguárdate en casa (sic).”

Así está de confuso el tema.

Ahora podemos plantear las preguntas que siguen al desorientado oficinista del quinto piso: si usted escucha la alarma sísmica, ¿qué hace? ¿Se queda donde está? ¿Abandona el edificio (ahora que tiene unos 40 segundos antes que empiece a temblar)?

Seguramente no sabrá qué contestar. Si hablamos a Protección Civil seguramente nos dirán que no corra, no empuje, no grite ni use el elevador.

Podría ser tanto más sencilla una instrucción clara y sin ambigüedades. Se salvarían vidas y muchas horas de inútiles simulacros donde no se aclara este tema.

Hasta ahí las reflexiones de nuestro oficinista que cavilaba en el quinto piso de un edificio, mientras éste se bamboleaba a 7.1 grados de la escala de Richter.

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