Línea de ayuda para reportar fraudes al estado
Una línea telefónica de ayuda (hotline) para luchar contra el fraude fue lanzada el 22 de julio para animar a los Nevadenses a reportar casos de fraude relacionados con los fondos estatales.
La línea de ayuda 702-687-0150, es el resultado de la ley 327 que se discutió en la pasada legislatura 2013, y que requiere que el director del Departamento de Administración establezca una línea telefónica para que empleados y empleadores del estado puedan reportar casos de fraude. La ley también requiere que el número esté visible en cada edificio público de agencias estatales.
Si ellos están recibiendo dinero estatal o dinero federal y algo está mal, nos pueden llamar a la línea de ayuda, dijo Steve Weinberger, administrador de la división de auditorías internas del estado de Nevada.
Al llamar a la línea, la gente tiene que dejar un mensaje con su identificación explicando la situación sospechosa. Weinberger dijo que las identidades de las personas que llaman se mantendrán anónimas.
//Fraude a hispanos//
Aunque esta línea de ayuda sirve únicamente para denunciar casos de fraude relacionados con mal uso del dinero estatal, es claro que la comunidad hispana es un objetivo de fraude en más de una modalidad.
En el 2012, se reportaron 9.854 denuncias por fraude, según el informe de la red centinela del consumidor de la Comisión Federal de Comercio.
En el mismo año, un empresario basado en Las Vegas que anunciaba modificaciones de préstamos de vivienda en español en varias ciudades del sudoeste enfrentó a cargos criminales del Procurador General en Nevada. Gustavo Anaya engañó a varios latinos prometiéndoles que podría bajar sus pagos mensuales hasta la mitad. Anaya les pedía dinero por su ayuda pero los clientes nunca vieron resultados.
También ocurrió con falsos médicos, como el de Juan Alberto Ruan-Rivera, quien le decía a sus pacientes que era un médico autorizado en México, pero no era cierto. Ruan-Rivera engañó por lo menos a tres víctimas supuestamente asaltándolos sexualmente mientras estaban bajo medicamentos que los mantenía semidormidos. Su caso espera decisión de la Corte de North Las Vegas.
La defensora de asuntos del consumidor para minoridades del Departamento de Negocios Industriales del estado de Nevada, Miriam Hickerson, dijo que su oficina orienta principalmente a la comunidad hispana en casos de fraude. Ella trabaja como enlace entre la comunidad y las agencias gubernamentales para llevar a cabo acciones de resolución de disputas.
Todos somos consumidores, dijo Hickerson. La oficina de la ombudsman está tratando de ayudar a víctimas, no a victimarios.
Hickerson tiene cinco años atendiendo asuntos del consumidor y dijo que los latinos frecuentemente son víctimas de casos de fraude.
Creo que el fraude más recurrente es del trabajo en donde los empleadores no quieren pagar lo justo, dijo.
También en casos civiles entre amigos que se asocian y luego las cosas no resultan bien.
Pero Hickerson dijo que es importante no confundir un fraude con un mal negocio.
Explicó que un fraude es cuando alguien le promete algo que no va a cumplir o le hace prácticas engañosas. Un mal negocio es cuando usted tomó una mala decisión. En todo caso, siempre se puede hacer una denuncia, pero en casos de malos negocios, la resolución es mínima.
Hickerson agregó que uno de los problemas en casos del consumidor es que hay muchas personas que se dedican al fraude porque dicen lo que la gente quiere oír. Por eso tenemos que saber que siempre hay más de dos pasos que dar para avanzar, dijo ella.
En un esfuerzo para mantener la comunidad informada sobre el fraude, el Departamento de Negocios Industriales lanzó la página de Internet informativa llamada Fight Fraud Nevada o Lucha Contra El Fraude Nevada.
Allí las personas pueden buscar cualquier tipo de fraude e información sobre casos similares. También proporciona recursos para las víctimas.
La funcionaria aclaró que para reportar o pelear un caso de fraude, no importa el status migratorio de la víctima. Toda la gente tiene el derecho a reclamar un caso y también existen cortes gratuitas, según Hickerson.
Tengo la intención de hacer una diferencia y ser la voz de aquellos que tienen miedo de presentar quejas cuando son víctimas de fraude.
